Aunque ha llovido tarde, comienzan a verse especies interesantes. En este caso
Coprinus atramentarius. Es una seta comestible, asociada a cursos de agua y crece en cualquier hábitat, libre de herbicidas. Su consumo tiene dos "inconvenientes". El primero es que, al igual que todos los coprinos, madura de forma muy rápida. La segunda, es que posee un tóxico, soluble únicamente en alcohol, por lo que es imprescindible no consumir ninguna bebida alcohólica en las 48 h. siguientes a su ingesta. Se ha usado en tratamientos contra el alcoholismo, de ahí su denominación común de "seta antialcohólica".