Este otoño tardío o primavera temprana, con lluvias generosas y buenas temperaturas (sin heladas excesivas), está prodigando una buena temporada de setas, en las zona de baja montaña. En este caso
Sarcosphaera crassa
Literalmente del griego significa “esfera globosa”. Especie típicamente primaveral que aparece semienterrada, con un cuerpo globoso y un pequeño orificio de borde estrellado, para terminar abriéndose, mostrando su bello color violeta del interior.
Es una especie muy tóxica en crudo. Para su consumo, además de limpiarla bien de tierra (operación laboriosa y concienzuda) y ser de carne muy frágil, hay que dar un hervor previo o guisarla de forma prolongada; en caso contrario provoca intoxicaciones graves. La textura y grosor de su carne hace que se le denomine “Calamar de Monte”, por su similitud.
Ramaria stricta
Literalmente del latín “rama estrecha”. En una seta en forma de pequeñas ramas que vive sobre madera muerta. Vive a orillas de ríos y arroyos. Hay una especie similar que habita en pinar, pero con los extremos teñidos de verde. No es comestible.
Peziza repanda
Otra curiosa seta en forma de copa cerrada, que crece en primavera, en pinares. Tiene un suave olor a caucho. Es comestible previa cocción. A la hora de consumirla, no es conveniente mezclarla con otras especies pues le da una aroma extraño a la masa.
