Introducción Histórica

    A pesar que este municipio tiene una larga franja de su termino en la sierra, hoy parque natural, Santo Tome mira al río Guadalquivir y a su vega. Su ubicación es estratégica debido a que coincide en las cercanías la desembocadura del río de la Vega o Cerezuelo en el Guadalquivir,  allí donde la vega de este ultimo río se hace más amplia. Este hecho hace que desde la prehistoria fue un lugar de atracción de grupos cuya economía se basaban en la agricultura.

    Nos referimos a asentamientos de la cultura del cobre distribuidos a lo largo de las terrazas del Guadalquivir, como las que cruza la carretera de Santo Tome a Úbeda a pocos cientos de metros del pueblo. Otros semejantes se ubican en sus cercanías y en las faldas del cerro Albahaca.

    En la vega del Cerezuelo se ubican también estos asentamientos como el cercano al cruce de la carretera de Chilluevar.

    La ocupación humana de época prehistóricas solo es comparable con otro caso 2000 años después, nos referimos a la cultura ibérica que esta ampliamente documentada en las cercanías y alrededores del pueblo de Santo Tome. En este caso contamos con asentamientos de altura como el cerro Albahaca o el de la Dehesa y poblados como el cercano de los Turruñuelos o el del Molar.

    También hemos encontrado asentamientos de difícil definición en las lomas que delimitan la margen del río de la Vega. La cronología de estos asentamientos es muy amplia, desde el S. IV a C. hasta la romanización.

    Muchos de los citados presentan abundantes muestras de la cultura romana, sobretodo el poblado de Turruñuelos y otros que aparecen es este momento que parecen corresponderse a estructuras de asentamientos rústicos o agrícolas en las terrazas del río Guadalquivir y en las del río de la Vega. Incluso en las afueras de Santo Tome en la carretera del cementerio hemos encontrado cerámicas correspondientes a época romana.

    La presencia musulmana esta documentada de manera imprecisa, ya que los restos encontrados son escasos y poco reconocibles. Esta ocupación debió estar compuesta por alquerías de carácter agrícola.

     Esto suponemos durante los primeros siglos, sin embargo el valle del Guadalquivir se debió volver muy peligroso a partir del S.XII y sobretodo después con las campañas de Fernando III en las primeras décadas del S. XIII.

    Pensamos que la población debió buscar refugio en los hims o fortificaciones más cercanas como Nubla, La Iruela o el castillo de Cazorla e incluso desplazarse mas lejos hacia Quesada o al otro lado de la sierra.

    El Guadalquivir se convirtió en línea de frontera durante un largo periodo de tiempo. Por lo tanto pesamos que el origen de Santo Tome, como otros pueblos del adelantamiento, hay que buscarlo en la organización estratégica del territorio del adelantamiento por los cristianos.

    La necesidad de controlar el paso que desde el Guadalquivir siguiendo el valle del río Cerezuelo, penetraría al corazón y capital de las tierras del arzobispado toledano en el sur. Esto explicaría la existencia de la torre a través de noticias de principios del S. XIV, mandada hacer según parece por Pedro Diez de Quesada, justificando el que no aparezca en la lista de las conquistas iniciales de Rodrigo Ximenez de Rada. En cuanto al nombre vendría explicado por la batalla dada contra los musulmanes en las cercanías y donde los cristianos salieron victoriosos en el día de Santo Tome.

    A partir de este momento Santo Tome es lugar a medio camino entre Cazorla y las villas del otro lado del río, nos referimos a Iznatoraf o Villanueva del Arzobispo. Tras la conquista de Granada y alejado el peligro, comienza una etapa de repoblación ante las ricas perspectivas agrícolas y sobre todo comenzando el poblamiento de estos lugares. Santo Tome pasa a depender de La Iruela, jurídica y administrativamente y sus términos compartidos con La Iruela y Cazorla que aun no habían segregado los suyos desde que la primera fuera declarada villa en el S. XIV.

    La familia Díaz de Quesada,  de profundo arraigo en este municipio va a recibir en época de Felipe IV, el titulo de vizcondado de Santo Tome, de ahí que quizás por esta época o poco posterior provenga la construcción de la Casa Grande o de los Sánchez de Quesada y casi al tiempo la pequeña iglesia de Santo Tomas, formado un conjunto integrado donde la torre formaba parte de la casa y a su vez de campanario para la Iglesia que seria profundamente reformada en el S. XX

    Hacia principios del S. XIX se debe producir la concesión del villazgo al pueblo, ya que los aldeanos de Chilluevar pueden pertenecer a lo largo de todo este siglo, no solo a la villa de La Iruela, sino al propio Santo Tome. También sirva de dato que en el diccionario Geográfico de Madoz de mediados de siglo ya aparece nombrada como villa con término.

    Desde este momento y casi hasta la primera mitad del S. XX Santo Tome se establece como un ejemplo del sistema oligárquico establecido en Andalucía, donde la Casa Grande actuaba de control de todas las actividades sociales, políticas y económicas del pueblo.

    Hoy día Santo Tome se incluye en ese proceso de despoblamiento al que se ven sometidos casi todos los pueblos de nuestra Comarca, debido en parte a la transformación del sistema agrícola, el cultivo casi generalizado del olivar y la falta de diversificación en otras actividades.