1. Km 0 - Hornos de Segura
La ruta parte del bello pueblo de Hornos de Segura, declarado Conjunto Histórico-Artístico y desde
el que se puede contemplar gran parte del territorio que recorre el sendero Bosques del Sur. Su viejo
castillo árabe está rehabilitado como planetario y centro de interpretación astronómica, siendo muy
recomendable la visita.
El punto de inicio se sitúa en la salida del pueblo por la A-317 en dirección a Pontones. Justo cuando
dejamos las últimas casas, nuestro camino comienza a la derecha por una estrecha pista forestal en
bajada donde se observa un abrevadero para el ganado. A escasos 50 metros deberemos girar a la
derecha, siguiendo por otra pista bastante estrecha, que parece rodear al pueblo en bajada, alejándose
poco a poco de él.
2. Km 0,55 - Camino de herradura
La pista, cuyo estado es más deteriorado según avanzamos, desaparece y proseguimos por un antiguo
camino de herradura, utilizado desde tiempos remotos por las caballerías para acceder al pueblo desde
las cortijadas de la Vega de Hornos. De ahí lo
sinuoso de su trazado, para subir y bajar en
zigzag evitando la fuerte pendiente del terreno.
Los olivares que recorremos tienen una acusada
personalidad paisajística, ya que crecen sobre
terrenos en fuerte pendiente y se entremezclan
continuamente con manchas forestales. Son
cultivos cuya producción no es grande, pero
que dan un aceite de extraordinaria calidad.
Estos olivares tienen una gran importancia
en la economía, la cultura popular y la vida
cotidiana de las gentes del parque natural. Una
parte de ellos se cultivan según las normas de la
agricultura ecológica.
Apenas 300 metros más abajo, el camino de herradura desemboca en una pista forestal que da acceso
a las numerosas fincas de olivar que nos rodean. Debemos continuar por la misma, hacia la izquierda y
continuando el descenso.
3. Km 1,3 - Pista forestal asfaltada
Perpendicularmente al sentido de la marcha descubrimos una pista más ancha, en la actualidad
asfaltada, que recorre uno de los flancos de la cola norte del Embalse de El Tranco y sirve de acceso a
cortijadas como el Carrascal, La Platera o Fuente de la Higuera, todas habitadas. Nuestra ruta gira en
este punto hacia la derecha, para recorrer esta pista asfaltada, cruzando a 100 metros sobre el Arroyo
de los Molinos. Este suele mantener un caudal bastante regular y trae aguas desde las zonas altas de El
Yelmo Chico y La Cumbre. En este tramo llama la atención a la izquierda el magnífico bosque de galería
que forma el río Hornos y alguno de sus afluentes antes de su desembocadura en el embalse, formado
principalmente por sauces, chopos y sobretodo tarayes. A 300 metros nuestra pista desemboca en
una carretera A-319, ancha y en mejor estado. Giramos hacia la izquierda para cruzar el río Hornos,
aprovechando el puente de la citada carretera.
4. Km 1,7 - Cruce con carretera A-319
Al cruzar el río Hornos, nos desviamos de nuevo a la izquierda para tomar otra pista forestal estrecha
que discurre por el otro lado del embalse de El Tranco y es utilizada fundamentalmente para dar
paso a pequeñas explotaciones olivareras. El paisaje en esta zona es bastante diverso, de un lado los
agrosistemas de olivar y por otro pinares de carrasco mezclados con encinas y algún que otro roble
(quejigo) y majuelo. Todo ello acompañado de un sotobosque abundante formado por lentisco,
romero y coscoja fundamentalmente.
5. Km 4,45 - Camino de herradura del Chorreón
La pista se va estrechando para acabar convirtiéndose en un camino que se torna bastante estrecho
en algunos puntos. A unos 300 metros, la senda toma un poco de altura para salvar unas rocas que
constituyen un verdadero mirador natural, desde el que se nos brindan unas maravillosas vistas del
embalse y su entorno. Unos 300 metros más adelante dejamos a la izquierda las ruinas de antiguas
cortijadas que quedaron despobladas durante la construcción del embalse durante la década de los 40
del siglo pasado. Si el nivel del agua no es muy alto, pueden aflorar incluso las antiguas eras de piedra
que se utilizaban para separar el grano de la paja.
6. Km 5,4 - Encuentro con PR-A 193
En este punto encontramos el sendero PR-A 193, que hacia la derecha, en 2 kilómetros, nos llevaría a la
aldea de Cañada Morales, y al frente coincide con nuestra ruta a lo largo de varios kilómetros. A partir
de este punto la señalización de nuestra etapa llevará los colores blanco, rojo y amarillo, por coincidir
un sendero GR con un PR. A escasos 100 metros hacia la izquierda está uno de los mayores atractivos
de la ruta, la Cascada del Chorreón, formada por las aguas del Arroyo de Cañada Morales al precipitarse
desde cierta altura sobre las tranquilas aguas de El Tranco. Durante los meses de primavera y otoño, con
las lluvias, es más espectacular que en épocas de estío.
A partir de aquí la senda vuelve a ser pista forestal estrecha, y el paisaje se salpica de nuevo con
algunos olivos. A dos kilómetros dejamos a la izquierda las ruinas del Cortijo de Montillana, también
deshabitado desde la construcción del embalse.
7. Km 7,6 - Pista olivarera hacia Montillana-Parrales
Nuestra ruta se separa del PR-A 193, que continúa al frente siguiendo en paralelo el embalse. Este PR es
un camino señalizado con flechas blancas y marcas blancas y amarillas, sin apenas desnivel y de gran
belleza paisajística. Si siguiéramos por él llegaríamos hasta la presa del embalse, caminando durante el
último tramo por carretera la A-319.
Nuestra etapa, sin embargo, nos lleva hacia la derecha, por pistas estrechas en terrenos de olivar que
ganan altura poco a poco, ampliándose las panorámicas de las que podemos disfrutar. Dado que esta
es la etapa más corta del sendero Bosques del Sur, bien podríamos continuar el PR-A 193 hasta la presa
y después volver a este punto para continuar la misma. O también, una vez en la presa, regresar por la
A-319 -dirección Cañada Morales- hasta la zona del Área Recreativa Los Parrales y Montillana, donde
finaliza la etapa 4 y comienza la etapa 5.
8. Km 8,7 - Montillana y Aérea Recreativa Los Parrales
De nuevo conectamos con la A-319, justo frente al camping Montillana. Aquí desaparecen los olivares
para dar paso a excepcionales bosques de pino carrasco con denso matorral mediterráneo. A pocos
metros hacia la izquierda está el acceso por pista forestal al área recreativa. Esta área es uno de los
mejores miradores sobre el embalse de El Tranco, que cubre la antigua Vega de Hornos y que, con
sus casi 500 hectómetros cúbicos de capacidad, es uno de los mayores de Andalucía. Es una delicia
contemplar sus tranquilas aguas reflejando los bosques que cubren las montañas que lo circundan.
Si en lugar de bajar al área recreativa continuamos por la carretera, enseguida encontraremos a la
derecha un cruce con una pista forestal que es el inicio de la etapa 5.
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